El sabor de lo prohibido.

Solo los dos sabemos la falta que nos hacemos



En cualquier momento,
en cualquier lugar,
con los brazos abiertos,
siempre esperándote estaré.
Cuando surjan los deseos
y el sabor de lo prohibido
nos encuentre sumergidos
yo en tu cuerpo, tú en el mío,
encenderé con frases tu piel,
mi alma entera entregaré.
Y perdidos en la tarde
luego de tanto placer,
contemplarte dormir
para en mis ojos imprimir
cada detalle de tu ser.
Laura Roda


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